En una impactante serie de declaraciones, los miembros del grupo de R&B 112 han salido a la luz para compartir sus experiencias con el rapero y productor Diddy. En una reciente entrevista, los artistas revelaron detalles sobre su relación con Diddy y las situaciones que vivieron durante su tiempo trabajando juntos.
Los integrantes de 112, conocidos por éxitos como “Peaches & Cream” y “Cupid”, no se contuvieron al hablar sobre lo que consideraron comportamientos poco profesionales y manipulativos por parte de Diddy. “Hubo momentos en los que nos sentimos presionados a hacer cosas que no queríamos. La dinámica de poder era muy clara,” compartió uno de los miembros del grupo.
Durante la entrevista, los miembros de 112 describieron cómo la influencia de Diddy afectó su carrera y su bienestar personal. “Él tenía una visión muy específica de cómo quería que sonáramos y cómo debíamos comportarnos. A veces, eso iba en contra de lo que nosotros queríamos como artistas,” comentó otro integrante. Estas revelaciones han generado un debate sobre la ética en la industria de la música y las relaciones entre artistas y productores.
Las declaraciones de 112 han resonado en las redes sociales, donde muchos fans han expresado su apoyo al grupo. “Es valiente de su parte hablar sobre sus experiencias. La industria musical necesita más transparencia,” escribió un seguidor en Twitter. Otros han comenzado a cuestionar la reputación de Diddy y su comportamiento en el pasado.
Estas revelaciones también ponen de relieve la cultura de la industria musical, donde los artistas a menudo se encuentran en situaciones difíciles debido a la presión de las casas discográficas y los productores. Expertos en la industria han señalado que es crucial que se escuchen y respeten las voces de los artistas para evitar abusos de poder.
Las revelaciones de 112 sobre su experiencia con Diddy han abierto un nuevo capítulo en la conversación sobre la ética en la música y la dinámica de poder en la industria. Al compartir sus historias, los miembros del grupo no solo están defendiendo su verdad, sino que también están abriendo la puerta a diálogos más amplios sobre la necesidad de un cambio en la forma en que se gestionan las relaciones dentro del mundo del entretenimiento. A medida que la historia continúa desarrollándose, muchos esperan que se tomen medidas para garantizar un entorno más justo y respetuoso para todos los artistas.